Abril 7 de 2010
A la tenista checa Martina Navratilova de 53 años, una de las más grandes de todos los tiempos, fue diagnosticada con cáncer de seno, lo que la obligará a someterse a un tratamiento que la ayude a luchar contra la enfermedad.
Considerada una de las mejores tenistas de la historia, por sus 18 títulos de Grand Slam, récord solo superado por Steffi Graff, Martina Navratilova se consagró como una luchadora no solo en el campo de juego sino también en su vida personal.
PERFIL
Nacida el 18 de octubre de 1956 en Praga (Checoslovaquia) en un hogar de directivos del deporte blanco, Martina
quién desde muy joven se había destacado en la práctica de fútbol y hockey, empezó a tomar clases de tenis y supo
que este era el verdadero deporte que corría por sus venas (su abuela había sido parte del equipo checo) y desde ese momento dedicó su vida a las canchas.
Con una contextura muy delgada y una estatura de 1.73m, Martina empezó a destacarse. A los ocho años fue admitida en su primer torneo en el cual avanzó hasta semifinales. A los 14, fue campeona nacional y a los 16 ya era considerada como la tenista más cotizada en Checoslovaquia.
Ya en 1975, cuando tenía 19 años, Martina tomó una decisión que sorprendió a muchos: Se nacionalizó estadounidense y dejó atrás el régimen checo. Y a pesar de la polémica en su país, se convirtió en profesional y empezó a dar muestras de lo que iba a ser una carrera llena de éxitos, pero sobre todo de títulos. Ese año avanzó a las semifinales del Abierto de Francia y de Australia. En 1976, hizo lo mismo en Wimbledon.
En 1978, consiguió su primer título en Wimbledon, corona que retuvo el año siguiente, la ganó seis veces seguidas entre 1982 y 1987 y nuevamente en 1990.
En 1981, justo cuando ganó el Abierto de Australia, torneo en el que repitió título en 1983 y 1985 y consiguió el trofeo de la Copa Federación, Martina hizo una revelación que la puso nuevamente en el centro de la polémica: Confesó abiertamente su condición homosexual. Y las reacciones no se hicieron esperar. Los primeros en pronunciarse fueron sus padres quienes se sintieron perturbados y calificaron la condición de su hija de "enfermedad" y dijeron que habrían preferido que Martina fuera una "prostituta".
Sin embargo, y a pesar de la difícil situación familiar que vivía, Martina no dejó que esto afectara su rendimiento siguió ganando títulos.
En 1982 ganó Roland Garros y volvió a hacerlo en 1984. Ese mismo año, ganó por segunda vez la Copa Federación y por tercera vez dominó en Wimbledon. Ya en 1983, a sus 27 años, conquistó el US Open, que conseguiría al año siguiente y también en 1986 y 1987. Y en el plano personal, inició una relación sentimental con Judy Nelson.
La Copa Federación volvió a ser suya en 1989 y 1990. En este último año consiguió su último título de Wimbledon.
En 1991, su vida amorosa acaparó los titulares. Martina terminó su relación de ocho años con Judy Nelson, en medio de una pública batalla legal.
Un año después de su tormentosa ruptura amorosa, Martina que no se conformaba con una vida demasiado normal, decidió aceptar un reto: Enfrentar a Jimmy Connors en un partido que fue denominado como la "Guerra de los sexos". Aunque perdió el juego por 7-5 y 6-2 en 88 minutos y la fortaleza física de Connors se hizo evidente, Martina dio un gran espéctaculo. Sin embargo confesó que nunca había sentido tantos nervios en toda su carrera.
En 1994, cuando contaba en su palmarés con el récord de victorias del Grand Slam femenino, con dieciocho y un total de 163 títulos a lo largo de su carrera se retiró de las canchas, tras ser derrotada por Conchita Martínez en la final de Wimbledon de ese mismo año. Meses después fue galardonada con el Premio Príncipe de Asturias de los Deportes.
Allí terminó su batalla en las canchas, pero ahora a sus 53 años, empieza una nueva batalla, pero esta vez por su vida. Ahora Martina Navratilova lucha contra el cáncer de seno.
Caracol / María Fernanda Segura Sánchez
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